Hotel Seattle South Lake Union

Criterios de adjudicación

Excelencia arquitectónica

Este hotel único tiene seis niveles de módulos de habitaciones y dos niveles de construcción tradicional (sótano y planta baja). La construcción in situ incluyó el nivel de entrada, que proporciona volúmenes de grandes luces para el vestíbulo, las salas de estar, los espacios de reunión y la cafetería, así como espacios MEP bajo rasante y el gimnasio. Las 264 habitaciones del hotel, totalmente acabadas y amuebladas, de unos 2,5 metros de ancho, se entregaron listas para apilarse y conectarse por encima del nivel de transferencia del vestíbulo. Se ha demostrado científicamente que alivia el estrés habitual de los viajes: ansiedad, insomnio y falta de concentración.

Innovación técnica y sostenibilidad

El citizenM de Seattle es uno de los primeros edificios modulares de mediana altura construidos en una zona altamente sísmica. Trasladar el diseño modular estructural de la costa este a una región altamente sísmica de la costa oeste exigía un planteamiento único que implicaba trabajar de arriba abajo en lugar de hacerlo de abajo arriba. Los módulos se apilan sobre una losa de transferencia de hormigón y se apoyan en un par de núcleos de hormigón como sistema lateral principal del edificio. En cada nivel, los diafragmas estructurales prefabricados están en el techo de cada módulo. A continuación, se unen mediante una serie de barras colectoras de acero y placas de cizallamiento que transportan las cargas sísmicas hasta los núcleos y luego hasta los cimientos. El principal reto del diseño modular antisísmico es que los módulos de acero deben soportar grandes desviaciones entre plantas, ya que las plantas adyacentes se mueven de un lado a otro durante un terremoto, sin que cedan los esbeltos pilares del armazón del módulo. Además, los módulos debían permanecer rígidos durante el transporte y el montaje.

Rentabilidad

Dentro de los módulos para huéspedes, cada habitación cuenta con una viga fría activa, que consigue un bajo consumo de energía, bajos criterios de ruido y bajos costes de mantenimiento, ya que las vigas frías no tienen componentes móviles. Además, cada habitación cuenta con un controlador inteligente que utiliza un iPad o la galardonada aplicación móvil de citizenM para controlar las persianas, la climatización, la televisión y las luces. En general, el equipo de diseño pudo reducir la huella de servicios en el plano de planta manteniendo la altura de suelo a suelo de los módulos. El edificio utiliza un suministro de aire exterior específico y bombas de calor que proporcionan simultáneamente calefacción y refrigeración. La bomba de calor aprovecha el calor sobrante para precalentar el agua caliente sanitaria, algo único en un hotel. Con la adición de paneles solares en el tejado, todo el hotel ahorra un 29% de energía en comparación con la línea de base y ha obtenido la certificación LEED Oro.