La aldea Hilda L. Solis Care First

Criterios de adjudicación

Excelencia arquitectónica

Hilda L. Solis Care First Village consta de 232 viviendas para personas sin hogar y un edificio administrativo suplementario, en los que se han utilizado diversas soluciones de construcción modular. Se construyeron 132 camas en dos edificios de tres plantas con 66 contenedores de transporte adaptados. Las 100 camas restantes se construyeron con 20 estructuras modulares de madera provisionales. El edificio administrativo se construyó con una estructura permanente de madera, compuesta por 9 unidades modulares. Para el proyecto se fabricaron e instalaron dos ascensores modulares. Aparte de los típicos refugios densos para personas sin hogar, que resultaron ineficaces con la pandemia, este proyecto adoptó un diseño que permite a cada ocupante disponer de su propia vivienda, con zona para dormir y cuarto de baño. Más del 50% de las unidades se diseñaron para que fueran compatibles con la ADA.

Innovación técnica y sostenibilidad

Con la eficiencia en tiempo y costes como principales motores, un método modular de diseño y construcción era la forma ideal de cumplir los requisitos. El proyecto presentaba varios niveles de desafíos, como tener lugar durante una nueva pandemia con continuos problemas en la cadena de suministro y cierres abruptos, en un emplazamiento contaminado y en días festivos importantes. El plazo de ejecución del proyecto, desde el inicio hasta la ocupación, fue de sólo 6 meses, lo que lo convierte en uno de los proyectos más singulares de California por el tipo de solución incorporada y el plazo de ejecución.

VESTA tuvo que configurar una solución que cumpliera los requisitos del Condado al tiempo que sorteaba los retos derivados de la pandemia. Tras una búsqueda por todo el país se llegó a una solución que proponía el uso de distintos tipos de construcción modular (contenedores de transporte retroadaptados, estructuras de madera temporales y permanentes, utilizando tres fábricas en Desoto, TX, Boise ID y Carson, CA), así como ascensores prefabricados de Vernon, IL.

Rentabilidad

Para construir 232 unidades de vivienda utilizando la construcción tradicional, el coste del proyecto habría sido mucho mayor. Al coste medio en 2019 de 531.373 dólares para construir una unidad de vivienda con métodos de construcción in situ, este proyecto de 232 unidades habría costado 123.278.536 dólares. El coste medio por unidad de la Hilda L. Solis Care First Village fue de unos 245.689 dólares, menos de la mitad del coste en comparación con la construcción tradicional. A los beneficios sociales de las viviendas de apoyo hay que añadir los beneficios para el contribuyente. Por cada persona que sufre un desamparo crónico, los contribuyentes pagan una media de 35.578 dólares al año. El coste anual de una vivienda de apoyo para una persona ronda los 12.800 dólares. Los beneficios financieros son numerosos y definidos. El planteamiento del proyecto ofrece una solución escalable y un modelo repetible para mitigar la crisis de los sin techo en todo Estados Unidos.